El pan es una de mis pasiones. El comienzo, desde la preparación de la levadura, el pesado de la harina; es como una especie de alquimia. Mi madre era farmacéutica, tal vez el estar en el laboratorio desde pequeña...Quiero compartir esa magia, ese sentimiento de elaborar algo vivo.
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lunes, 25 de junio de 2012

HOY HABLAMOS DEL JALÁ O CHALLAH.

La palabra hebrea jalá se refiere a las dos hogazas de pan trenzado que conforman el centro de la comida del Sabat y de las fiestas judías. Pero en su significado básico,  la jalá es el pedazo de masa del tamaño de una aceituna que tradicionalmente los panaderos judíos y las amas de casa separan y queman cada vez que cocinan el pan.



Recibió el nombre de jalá en la Edad Media en el sur de  Alemania, cuando los judíos lo adoptaron para el Sabat; se convirtió en el pan ritual en Austria y Bohemia y más tarde también en Polonia, Europa del Este y Rusia, cuando los judíos emigraron  hacia el este.
Las amas de casa lo amasaban el jueves, lo dejaban fermentar de un día para otro, y se levantaban el viernes temprano por la  mañana para hornearlo.
Es un pan dulce que lleva huevos, se le puede agregar miel  o pasas y se espolvorea con semillas de sésamo o amapola, siempre presentes en los panes judíos.
Vemos antes de ir al horno el proceso de levado.




 Si no le ponemos azúcar y pasas tenemos la versión salada, yo hice uno de cada tipo...









El olor especial del pan horneado que impregna la casa, es el aroma del Sabat, un aroma que relacionamos con el antiguo mundo de habla yiddish y con nuestras "bobes", los que tuvimos la suerte de disfrutarlas...
Las semillas pueden ser de sésamo o amapola o inclusive ambas.
Lo que les puedo asegurar, historias aparte, es que están riquísimos y les aconsejo que los prueben. 



2 comentarios:

  1. Que maravilla de pan. El tema de los panes es una de mis asignaturas pendientes que algún día tendré que meterle mano.
    De momento, después de un par de meses, ya he logrado una masa de pizza a mi gusto. Ahora toca los panes.

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  2. Realmente esto del pan es un mundo, crea adicción, yo también comencé con las pizzas y ahora no puedo dejar de amasar, yo lo hago con las manos, y el contacto con la masa es terapéutico.
    Siempre digo que mientras amaso, mi mente se relaja y resuelvo problemas.
    Anímate, después no podrás dejarlo; cualquier consulta encantada de ayudarte.
    Muchas gracias por tu comentario.

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Gracias por vuestros comentarios!!!
Son la base de mi blog y el éstimulo para seguir adelante.